Supongo que ya medio país vio el vídeo de la humorista venezolana Vanessa Senior, ese que grabó en un Farmatodo. Leí muchos comentarios a favor y en contra de lo que hizo. Pero más allá de la razón, está la forma. Que se queje está bien, muy bien diría yo, pero la queja se viene abajo cuando ofendes a la otra persona, cuando te expresas con groserías sin aportar nada a la discusión. La cajera no tiene la culpa de los precios justos, tampoco es cómplice como sí lo son los dueños de esos negocios que aceptaron poner captahuellas y todo un equipaje para controlar las compras de cada quien.
Si te vas a quejar de esa manera, vete a un lugar donde puedas debatir con la gente y explicarles que tú tienes el derecho de comprar cuatro o seis cremas dentales. A que me refiero con esto, pues que la idea es hacerle entender al otro, sea la cajera, el gerente, el de la cola, por qué tú quieres comprar cuatro cremas y no dos. Yo lo hago cada vez que compro, me quejo y lo hago con todo el mundo, lo hablo con el que me encuentro en el pasillo, le pregunto a la cajera si cree que eso está bien. De hecho, en estos días llegué a las dos de la tarde a un supermercado porque me dijeron que a esa hora venderían pañales. Llegué y encontré a un tipo de la Sundee y le dije que no era posible que sacaran las cosas por horas y por ahí me le fui. Lo cierto es que hablamos unos quince minutos. En un tono normal, pacífico pero siempre dándole a entender que no tenía la razón y que era cómplice de este gobierno y de la escasez. Sin miedo. Yo pudo haberle caído a gritos y a groserías, y pude haberlo grabado también. Pero ¿y que ganó con eso? Ah, bueno, que el vídeo sea viral como el de Vanessa Senior… ¡Gran vaina!
Con todo esto quiero decir que ese no es el camino, que esa conducta es la misma de los chavistas cuando huelen a un opositor. ¿Quieres formar un peo? Perfecto, pero hay muchísimas formas de hacerlo sin caer en las ofensas. Pero me gustaría ir más allá. El venezolano es pasivo por naturaleza, y si todo lo que está pasando no lo activa, no lo despierta, pues un vídeo en un Farmatodo «meándote en los precios justos» y queriéndole llevar colgate a «unas amigas putas», no lo van a cambiar. Que alguien debe comenzar a cambiar las cosas, sí, es verdad, pero no de esa forma.
En un país donde a la gente le arrecha más la muerte de una perrita que el asesinato de un doctor en su casa es, sencillamente, un país jodido. No estoy a favor del maltrato animal ni mucho menos. Es que aquella vez hasta amenazaron con ir a quemar la tienda y en las redes sociales todo era eso. Pero yo no he visto que la gente se haya puesto tan iracunda por el problema de los pasajes aéreos -porque aquí estamos prácticamente presos-; no he visto que la gente convoque una marcha por los altos precios del atún; no he visto a la gente quejarse por las granadas que ahora cargan los malandros.
Por último, defino la palabra «pasivo»: que permanece inactivo dejando que las cosas ocurran sin su intervención.
Eso somos.
Es cierto con la grosería no llegamos a ningún sitio
Sin duda un vídeo que te hace pensar demasiado y libera una tormenta de sentimientos encontrados: Qué tipa tan arrecha! Pero por qué lo graba? Cuántos dirigentes vecinales y estudiantes hacen eso día a día sin un celular o go pro? Dejan de ser más «arrechos» que Vanessa Senior? Me perdonan las groserías, evito decirlas y menos escribirlas pero aquí lo amerita. Si esta es su forma de despertar conciencia hacia los jóvenes que deben escribirse, pues como dices tu «estamos muy jodidos». Cuando se les quiere convencer con groserías, violencia y ataques a un trabajador que está muy lejos de ser «clase media en positivo» (se acuerdan de este programa social del difunto? Le tocó la misma suerte que a HCHF, murió solo que muchos años antes de él porque sabía que ese era el destino de la clase media: desaparecer) algo está muy mal en esta sociedad, no sé si será el agua, el aire o una tara generacional. Toca hacer una introspección muy intensa en cada uno de nosotros!
Totalmente de acuerdo. Esa no es la manera de ser «activos». Cuanto tiempo llevamos pasivos ante la escasez de alimentos, inseguridad, etc. El peor mal de los venezolanos es que nos acostumbramos a lo malo