
Ya tocaba dejar atrás el amargo capítulo con las estrellas de TAM. Había buen ambiente de Sao Paulo, al menos eso noté en el aeropuerto, donde encontré gente de muchos países; unos más perdidos que otros. Me esperaban dos noches antes de encontrarme con mi hermano menor en Salvador de Bahía. Seguir leyendo «Mi primer Mundial: Dos noches en Sao Paulo (III)»